La semana pasada me la tiré bregando con ocho temas introductorios de Derecho Procesal, intentando esquematizarlos todos en una cara de folio, mejor, de DIN A4, a requerimiento del profe. Al final, se me vino el Santo del Cielo y el esquema lo planteé como un frondoso árbol, soportado en una base formada por el Poder Judicial y el Personal Jurisdiccional de la Administración de Justicia. El grueso tronco, Derecho Procesal propiamente dicho, tiene tres ramas: La Acción, La Jurisdicción y el Proceso.
En la copa del árbol se encuentra el Objeto Procesal, tanto el Subjetivo (Las Partes), como el Objetivo. Finalmente, este árbol está regado por la fina lluvia de la nube de las Fuentes del Derecho Procesal y recibe el calor y crece en el entorno del ámbito del Derecho Procesal. Te lo dejo abajo por si puede interesar. A mí me ha dado otra visión menos árida de esta disciplina (Este texto se ha editado también en el sitio "Blog de Manuel", bajo el título "Frondoso árbol").