ISO 37001:2016 - Evaluación del desempeño

Fuente de la imagen: elaboración propia

En línea con L. Steel, J. Broady-Preston[1], K. Manasa y N. Reddy[2], una evaluación del desempeño es un proceso sistemático, general y periódico que evalúa el desempeño laboral y la productividad de un colaborador en relación con ciertos criterios preestablecidos y objetivos organizacionales, considerándose también otros aspectos de los empleados, como el comportamiento organizacional, logros, potencial de mejora futura, fortalezas y debilidades, etc. En este sentido, la Norma ISO 37001:2016 se centra en la evaluación del desempeño del sistema de gestión antisoborno, plasmada en la valoración de la eficacia de dicho sistema y de su desempeño en la entidad. El capítulo 9 consta de cuatro apartados: seguimiento, medición, análisis y evaluación; auditoría interna, revisión por la dirección y revisión por la función de cumplimiento antisoborno.

El primer punto, además del seguimiento, incluye un inventario de fuentes de opinión (personal, clientes, proveedores, contratistas, reguladores, terceras partes…), sobre el desempeño del sistema de gestión antisoborno (no cumplimientos, eficacia, desempeño…), mediante métodos de recopilación que pueden incluir informes de no cumplimiento, información proveniente de canales directos, pruebas integrales, etc. También, orienta hacia un desarrollo de indicadores (ratio de empleados que han recibido formación, frecuencia de contactos con reguladores, sistemas de recepción de opiniones…), reactivos (cuestiones y consecuencias de no cumplimientos, tiempo utilizado en la formación…), predictivos (riesgos y tendencias de no cumplimientos), que contesten a las cuestiones qué y cómo medir el desempeño[3].

Otro aspecto importante de este capítulo lo configura la función de auditoría interna, ya sea esta realizada por personal interno a la organización o subcontratada, pero siempre bajo las premisas de independencia y sin conflicto de intereses (añado: suficiencia técnica). De esta forma, se verifica si el sistema de gestión antisoborno cumple los requisitos propios y se implementa y mantiene de manera eficaz. Para ello, se dispondrá de un programa de auditoría interna donde se definirán los criterios, objetivos y alcance de la auditoría. El órgano de gobierno y la alta dirección deben revisar periódicamente el sistema de gestión antisoborno para asegurar su idoneidad, adecuación y eficacia continuas. Finalmente, la función de compliance antisoborno debe evaluar periódicamente la bondad del sistema. Fuente de la información: doctrina referenciada y Norma ISO. Fuente del esquema: elaboración propia.

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[1] Steel, L., Broady-Preston, J. Employees, customers, and internal marketing strategies. Ed. Library Management.2002.

[2] Manasa, K. Reddy, N. Role of Training in Improving Performance. The IUP Journal of Soft Skills. 2009.

[3] El sistema de seguimiento debe incluir aspectos tales como la eficacia de la formación, de los controles o de la gestión de fallos, la asignación de responsabilidades, la actualización de las obligaciones o las revisiones de las estrategias frente a los riesgos.